Hola a todas!
Bienvenidos una vez más a mi Blog.
En el post de hoy les voy a contar todo sobre las prendas vintage, un clásico que nunca pasa de moda y te permite jugar con el armario de tu abuela como cuando eras chiquita.
Para empezar, voy a comenzar contándoles que la palabra vintage no es sinónimo de viejo, sino que una prenda es considerada de esta forma cuando ha sobrevivido al menos veinte años después de su creación.
Esto no quiere decir que estas prendas están usadas, sucias o en mal estado, que muchas veces es lo primero que uno piensa y ya automáticamente lo tachamos de nuestra lista de opciones. Es por eso que las quiero amigar con las ferias a todas aquellas que no se animan, y a las que sí, invitarlas a que me acompañen en este post que viaja un poquito a través del tiempo.
Para contarles como empezó mi interés por lo vintage, debo confesar que soy amante de los años 50` y los 20`. Los vestidos, siluetas, bordados y detalles que tienen las prendas de esa época me enamoran cada vez que miro una película ambientada en ese período. Es así que comencé a tomar interés por el placard de mi abuela y cada vez que tenía la oportunidad, investigaba todo lo que estaba a mi alcance.
Una de las primeras prendas que me regalo mi abuela es una antigüedad familiar, o mejor dicho, reliquia, ya que es una camisa de gasa que pertenecía a mi bis-abuela “La Nonna”. Apenas la vi, me quedé asombrada por la cantidad de detalles que tiene. Recortes de encaje en el frente y un cuello cerrado con terminación de puntillas el cual se abotona en la espalda con una tela extremadamente delicada y fina. Así es como llegue a entender que es totalmente posible vestir prendas de otra época y al mismo tiempo estar canchera, moderna y teniendo algo completamente original en mi outfit.
Lo más lindo de una prenda vintage, es la historia que la acompaña. El solo hecho de pensar en el entorno mediante el cual fue confeccionada o imaginarse las anécdotas que la rodearon, me llena de curiosidad y emoción.
Por lo tanto, además de mostrarles algunos accesorios que fui adquiriendo con el tiempo, les voy a explicar cómo volverse expertas en la búsqueda de estas huellas del tiempo sin llevarse fiascos o elegir mal.
Primero que nada, lo más importante es saber distinguir una prenda vintage usada en mal estado de una nueva en buen estado. Como nos damos cuenta? Es fácil! Simplemente fijense en los detalles y el estado de los materiales que la conforman. Por ejemplo: un tapado usado generalmente tiene peeling o “bolitas” en los costados y la parte inferior de los brazos, lo cual obviamente no queremos. También es importante analizar el material con el que está realizada, ya que si la tela no es de buena calidad, no va a durar mucho.
Otro tip muy importante a tener en cuenta es concentrarse a la hora de elegir y no distraerse con cualquier cosa. Con esto quiero decir que generalmente van a haber miles de prendas a nuestro alrededor de las cuales el 97% no son lo que buscamos, pero apenas vemos algo un poquito más lindo o parecido a nuestro gusto personal, lo queremos llevar con nosotras. Error! Cuando veas una prenda vintage que realmente vale la pena, te vas a dar cuenta. No compres algo que realmente no te convence o no te termina de gustar por el solo hecho de comprar algo o porque pensás “creo que me gusta”.
Y por último, analizá bien si esta prenda o accesorio que estas comprando lo vas a poder usar en reiteradas ocasiones o simplemente te gusta pero no sabes cómo sumarla en tus outfits o vida diaria, de lo contrario, lo único que vas a hacer es tenerlo al fondo de tu placard como una especie de trofeo para mirarlo seguido sin saber qué hacer con ello.
En cuanto a la forma de combinar estas prendas, lo mejor siempre es tratar de armonizar el look total mezclando algo vintage con otra prenda o accesorio mucho más moderno para crear un balance y no quedar vestida como en una fotografía color blanco y negro.
Por ejemplo, la camisa de mi bis-abuela, me la suelo poner con un jean negro liso o de símil cuero, un blazer o campera de cuero (nunca vestir el pantalón y la campera de cuero simultáneamente) y ya que la misma tiene un cuello alto cerrado, la combino con un collar choker negro bien finito. Como calzado, unas zapatillas al tono o botitas negras.
Por último, les dejo mis dos lugares preferidos para ir en búsqueda de tesoros vintage:
Juan Perez Vintage – Direccion: Marcelo T. de Alvear 1355, CABA, Buenos Aires.
Galeria Quinta Avenida: Av. Santa Fe 1270, CABA, Buenos Aires.
Y el mejor de todos, el placard de tu abuela o bis abuela. Nunca falla, y además, vas a estar vistiendo parte de tu historia familiar cada vez que decidas ponértelo.
Espero que les haya gustado esta nota y aprendido un poquito más sobre el mundo de las prendas vintage. Ojalá se animen a combinar vestuarios de diferentes épocas y no se olviden de mandarme las fotos de sus outfits a través de mensajes por mis redes sociales.
Un beso grande!
- Nati Simon - 👠